En lugar de educarla, el maestro abusó de ella, levantó la mano en público y la humilló.
El hecho tuvo lugar en la escuela secundaria número 9 de la capital.
Para conocer los detalles del incidente e investigar las causas, los empleados de ARB visitaron la escuela.
Sin embargo, el personal de la escuela trató a los reporteros de manera inapropiada. Por lo tanto, a los periodistas no se les permitió ingresar a la escuela y sus preguntas quedaron sin respuesta.
Como esta honda, un grupo de personal de la escuela trató de irse. Las respuestas de los miembros del personal arrestados en el discurso de la escuela fueron divertidas.
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